La Feria de Consumo Responsable, una joya de la ciudad de Buenos Aires donde la gente puede acceder a productos en su mayoría reciclados o reutilizados, y a conocer más sobre prácticas de vida sustentable, tiene entre sus feriantes a BOOBAMARA, vegan shoes, un emprendimiento con una propuesta novedosa y comprometida.
Por Bárbara Dibene
Andrea de Iacovo empezó con local propio y dos mini locales en el Puerto de Frutos de Tigre, pero el tiempo y las cuestiones económicas la llevaron a volver a trabajar desde su casa y en ferias para promocionar su producto: calzado vegano. “Lo que lo caracteriza es que está realizado sin producto animal. En la industria del calzado, generalmente en nuestro país, se utilizan cuero y pieles de diversos animales, lo cual es dañino para el medio ambiente”.
Lo diseños son propios y realizados en materiales reutilizados como descartes textiles industriales, yute de los sacos de café e incluso los sobrantes que se generan en el propio taller. “Conseguir la materia prima es un poco difícil ya que no hay muchas opciones a la hora de elegir las telas, pero ahora yo estoy estampando”, asegura Andrea, que también logró tener una ayuda económica del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación para continuar con su proyecto.
Los colores llamativos, las suelas resistentes y los modelos únicos son algunas delas cualidades de BOOBAMARA que ofrece franciscanas, zapatillas, guillerminas y sandalias, entre otros calzados. También podemos encontrar remeras ilustradas con frases a favor del veganismo, que es un tipo de alimentación en el que la persona se abstiene de comer productos de origen animal.
Su participación en la Feria de Consumo responsable le permitió tener todavía más contacto con la gente, que siempre tiene curiosidad por este tipo de emprendimientos: “todos preguntan, pero en general los turistas son los que están más interiorizados en el tema del calzado vegano, y los que más circulan por la feria”. Andrea también aprovechó y sigue aprovechando el contacto con los otros expositores para aprender más de la sustentabilidad: “Lo que aprendí es a darle uso a las cosas que generalmente uno desecha, a reutilizarlas o darles un segundo ciclo de vida, a pensar un poco más a la hora de consumir”.